Juldain Farmazia - Ortopedia

Para resumir mucho, se trata de las substancias que componen un fármaco y cuya finalidad es aliviar o curar la enfermedad o nosología sufrida por el paciente.

Como siempre y en todo momento, la mejor opción en estos casos es consultar a tu médico o farmacéutico sobre la ingesta de alcohol. En muchos casos no se debe entremezclar el alcohol con los fármacos, pero asimismo es verdad que ciertos de ellos si dejan una pequeña ingesta.

Es peligroso tomar alcohol si estás tomando algún género de medicamento para la ansiedad, ya que en dependencia de la dosis y de la cantidad de alcohol ingerida puede llegar a producir somnolencia e inclusive una depresión respiratoria.

Otro ejemplo en el que los efectos del fármaco podrían verse potenciados son los antihistamínicos típicos de las alergias.

Hay que tener mucho cuidado con el alcohol si se están tomando antibióticos ya que estos no solo fortalecen el efecto del mismo, sino podrían reducir los efectos del medicamento y no conseguir recuperarnos adecuadamente.

Tomar antinflamatorios como aspirina, ibuprofeno etc así como alcohol puede afectar a la mucosa gástrica. Para no tener ningún problema, no olvide preguntar al médico.

No pocos son los que se asustan al leer el prospecto de los medicamentos, pero en él están descritos todos y cada uno de los efectos que podrían llegar a producir en el peor de los casos. No tienen pues sucederte todos esos efectos desfavorables. El médico es quien te conoce y quién sabe si hay algún riesgo en que consumas determinado fármaco. Consulta con el cualquier duda que tengas al respecto para tu tranquilidad.